El alcalde, Javier López Estrada, junto a la viuda y el resto de la familia de Juán José ‘Pepe’ Ingelmo Cangas, ha descubierto hoy la placa de la calle de Sierrapando que desde hoy lleva el nombre del recordado y querido jugador de bolos.
“Pepe Ingelmo fue un referente a nivel deportivo y también a nivel personal; un jugador de otra época que se merece todos nuestros reconocimientos”, ha afirmado el alcalde en el acto de nominación de su calle, al que ha asistido una amplia representación de la Corporación, además de amigos del deportista y compañeros del mundo de los bolos. Un reconocimiento el de hoy, que fue aprobado con la unanimidad del Pleno de la Corporación.
López Estrada ha repasado la vida de “uno de los mejores jugadores de bolos de la historia”, nacido en 1945 y que hasta su fallecimiento en 2019 “estuvo siempre vinculado al deporte de Torrelavega”. Una persona, ha resaltado, “muy querida” y que “siempre intentaba ayudar”, cuyo fallecimiento “dejó un gran vacío, no solo en el mundo de los bolos, sino especialmente a nivel humano”.
En nombre de la familia, el hijo del homenajeado, Eduardo Ingelmo, ha agradecido al Ayuntamiento “esta deferencia con nuestro padre” de dar su nombre a una calle de “su ciudad”. En un día “muy especial para la familia”, ha recordado que su padre “se sentía muy orgulloso de ser de Torrelavega, siempre presumía de ser torrelaveguense” y estuvo siempre “muy involucrado” con la sociedad de su ciudad “a nivel deportivo, cultural y en todos los sentidos”.
También ha destacado Eduardo Ingelmo “su generosidad, en su trabajo, en el deporte que le hizo llegar lejos” y también con las personas, porque “siempre que pudo tendió la mano a todos los que le pedían ayuda”, fueran familia, amigos o desconocidos.
La calle que desde hoy se llama Pepe Ingelmo, cumpliendo el acuerdo aprobado en pleno por unanimidad en septiembre de 2020, conecta la Avenida de Bilbao con el Barrio Sierrapando, junto a la zona comercial de Los Ochos.
Biografía
Portero de la Real Sociedad Gimnástica, una lesión en el hombro apartó a Pepe Ingelmo (1945-2019) del fútbol en su mejor época y le llevó a los bolos, convirtiéndose en uno de los mejores jugadores de la historia de este deporte.
Sus inicios fueron en la bolera de La Llama y como jugador de bolos prácticamente lo ganó todo, primero con su peña, La Bolística de Torrelavega, pasando por la desaparecida Mallavia, para fichar más tarde por C. Rotella.
Más allá de su faceta como jugador de partida, su fama deportiva tocó techo gracias a sus 17 títulos de parejas, 10 nacionales y 7 regionales, formando dupla con Chiqui Linares y, sobre todo, con Tete Rodríguez.
Ingelmo tuvo 60 años de carrera bolística en los que desempeñó prácticamente todas las facetas: pinche, jugador, preparador técnico y directivo (primero como presidente de La Bolística, de la que era presidente de honor, y posteriormente como vicepresidente de la Federación Cántabra de Bolos). Su amor por este deporte hizo que, prácticamente hasta el final, estuvo jugando en la Peña de Veteranos de la Bolística.